Y la puedes usar para beneficio propio y lograr así un bien común
¿Cómo?
Eligiendo qué pequeños cambios vas a realizar en tu día a día para así cuidar del planeta.
El otro día te contaba como un pequeño cambio en mi armario, hace que pueda ganar tiempo y dinero (beneficio para mi), contribuyendo así al cuidado del planeta (bien común).
Otro de los hábitos que he incorporado es intentar saber de donde proceden esas prendas que compro.
Mi intención es, partiendo de la premisa que vivo en una sociedad de consumo extremo y rápido, conocer que tipo de marcas se acercan a mi estilo de vida y que me van a permitir llevar a cabo mi revolución personal y cuidar del planeta.
Suelo buscar marcas que practiquen el Slow Fashion o moda lenta, que la podrás identificar por:
- Prendas elaboradas con materias producidos con materias primas ecológicas o procedente de telas recicladas.
- Sabes quién, dónde y en qué condiciones se produce la prenda.
- Proceso de elaboración de la prenda comprometido con el medio ambiente.
- Elaboradas de forma artesanal, en pequeñas empresas.
- Las prendas son producidas a pequeña escala otorgándoles exclusividad y haciéndolas únicas.
- Desarrollo del comercio local.
Y como no sólo me gusta buscar, si no también crear….
La marca de ropa que lidero está alineada con los valores que acabas de leer.
Ropa elaborada con telas recicladas procedente de preciosos Saris, que te ofrecen multitud de combinaciones con el resto de prendas de tu armario, conexión con tu yo más auténtico y una dosis extra de mimos al planeta.
Tú vida te pide un cambio, y el planeta ni te cuento
Disfruta de tu día,
Carmen